Walter Nelson, a mi modesto parecer, es un periodista que en su principio me parecía que ejercía bien su profesión y hasta me caía simpático, al igual que su colega Fabbri. Con el paso del tiempo me di cuenta que es un viejo cascarrabias -al igual que el conductor de Estudio Fútbol- que linda con lo payasesco -hermano, ¡pelate y sacate los pocos pelos que te quedan!
WN cuenta con un repertorio de latiguillos que repite partido tras partido y también con actitudes que son marca registrada en él y también en su compañero Alejandro Fabbri -ambos suelen opinar con la Constitución nacional en la mano, se creen los paladines políticamente correctos.
Varios DTs han desfilado por el banco del Club Atlético Independiente. Hombres del riñón del club y ajenos a la rica historia del club de Avellaneda.
Un dato que vale la pena no eludir: un técnico como Falcioni, con un equipo que no se relacionaba con el estilo de juego histórico del club, tuvo un relativo buen paso por la institución. Pero hubo un momento en que la gente del Rojo no soportó más el manejo del DT cínico, rozando lo soberbio, que ocasionó peleas con Pusineri -un ídolo del club, nada menos- y además, el juego poco vistoso del equipo -cuya mayor figura era Sergio Agüero- fueron los factores desencadenantes de la ida de Julio César de la institución diabla.
Los técnicos de la casa no dejaron un buen recuerdo: ni Bertoni, ni Clausen y ni Burruchaga -con su fresca renuncia el domingo pasado- pudieron levantar a un equipo y a un club que viene de capa caída y que cada día se aleja más de sus épocas de gloria, tan cotidianas hace 10, 20 y 30 años.
Es una década ya. En el año 1997 River culminó una etapa muy importante con el fútbol de su especie, con la exégesis de su propia tradición. Recuerdo bien esa semana, en siete días se le ganó a un gran San Pablo y el torneo local a Boca. Ahí terminó todo. Lo que vino después, lo que estamos viviendo es una larga década infame. El cabotaje no merece el recuerdo. Y no me interesan ahora los otros dos títulos de Ramón, ni el de Gallego, ni el de Pellegrini ni el de Astrada. River dejó de jugar bien diez años atrás. Y, Ramón, el único héroe en este lío, fue despedido.
Si hay algo por lo que no se caracterizó, Marcelo Gallardo, en éstos últimos tiempos, es el de ser alguien gallardo.
El ahora jugador del PSG, hizo varias declaraciones ante el innombrable, que no hablan bien de su buena fe como futbolista y tampoco de la veracidad con la que se expresó.
—¿Pudiste bancarte la exposición de ser el capitán de River?
—Para lo bueno y para lo malo. Y nunca me desvié de mi crítica, de estar cerca del equilibrio. Ni me creí todo lo bueno que decían ni me enganché en las pelotudeces que escuché. Estoy tranquilo con mi conciencia: actué siempre con buena leche y lealtad. Lealtad, eso es importante…
—¿Qué te dolió?
—Y… Reconozco que me equivoqué en algunas cosas y lo asumo, pero…
—¿Pero?
—Por tener temperamento fuerte. Manejar la adrenalina con la que vivís es difícil, y me habré equivocado, pero en cosas futbolísticas.
Los jugadores de GELP salieron a perder, y de esto, nadie puede decir nada. Algunos podrán comentar que vienen de comerse siete contra Estudiantes en el mismo estadio, que Colo Colo los bailó allá y acá, que Troglio es vende humo, etc. Es todo aire, señores…
No obstante, River y Estudiantes no tienen derecho a llorar por esta situación. Solo basta recordar el apertura 2005, en donde ambos equipos fueron pa’ tras en vistas de joderse al rival clásico (Gallardo expulsado, Estudiantes no presionaba).
Los que sí tienen derecho a reclamar, son los amantes al fútbol, porque esto nos perjudica a todos. Estos incidentes atentan contra la calidad del fútbol argentino, y también (díganme supersticioso, cabulero o gurú) contra la suerte/destino del fútbol argentino.
En un momento en que las selecciones de renombre no pasan por su mejor momento y en que las de segundo orden no pasan de ser más que “equipos bien armados” uno pensaría que un “típico equipo argentino” con una buena combinación de fútbol, picardía, orden, profesionalismo y el cuchillo entre los dientes debería ser de temer por cualquiera en el mundial que se viene… pero en lugar de eso tenemos el Peker-team…
El Peker-team es un equipo que sale a la cancha a ver qué pasa, no tiene un plan de juego definido ni mucho menos aun planes alternativos; le faltan jugadores pícaros, rápidos de mente; el orden defensivo brilla por su ausencia en una defensa completamente desaceitada en la que todos van al bulto; y casi no tiene jugadores con estirpe ganadora y un par de huevos extra.
El equipo de Pekerman exaspera por la combinación de lentitud, desidia, lateralización y falta de profundidad, da la impresión de que juega como si arrancase los partidos cinco goles arriba y no cobrasen premios… ahhh! pero el periodismo nos vendió que juegan “a la argentina”… y el público compró, compró “el trabajo con los juveniles”, compró “el perfil bajo que indica trabajo serio”.
Con esto inauguro mi status de posteador de La Redó.
No se quienes son todos los jugadores, pero entre ellos estan: Overmars, Kluivert, De Boer, Cocu y algun que otro holandes mas, y son de los jugadores mas AMARGOS del mundo, no podes quedar fuera del mundial de la forma que quedaron los flacos estos. Otro caso grave de amargura es de el “Tito” Bonano, es grave ese muchacho, diganle que le ponga azucar al cafe que quiza ayude!! Otro gran amargo: Luis Enrique que dijo “Vivo mi peor situación desde que llegué aquí” nunca entendi que le ven de jugador al flaco este, es horrible el hijo de puta, y se zarpa en amargo como buen jugador de equipo grande español…
Bueno, y para los que dicen que a Ronaldo no le gusta la fiesta
(En un post de amargura, ¿tenia que ir el amargo mayor no?)
El partido empezaba al mediodia, pero porque mi hermano organizo (se se) encontrarse con unos amigos e ir todos juntos, a las nueve ya estaba despierto, 3 horas antes, y casi llegamos tarde…es increible el flaco este, nunca puede arreglar las cosas para que salgan bien.
Desde antes de empezar ya sabia que clase de partido iba a ser, Argentina es una lagrima y Estados Unidos es peor, pero habia que ver el partido y tener la oportunidad de putear a Bielsa, Clemente Rodriguez y Diego Milito, para solo ejemplificar a mis preferidos.
Un comentario al margen, el publico argentino se la da de groso y es amargo, siempre la cancion esa poronga de “vamos vamos argentina” y esa pelotudez de pintarse la cara con banderas y cosas asi. Los “hinchas” de Estados Unidos, 25 creo que eran…, son mas amargos todavia, no podes festejar como si fuese un gol que al contrario lo amonestaron…. Otra cosa para “destacar” es el PELOTUDO que se hizo el barrabrava y prendio una bengala que nada que ver y despues no sabia que hacer con eso…..pelotudisimo, pero bue, los partidos de la seleccion son asi. Tambien habia gran cantidad de Haitianos, los haitianos son muy fanaticos del futbol y se dividen el favoritismo entre Argentina y Brasil, pero son fanaticos mal, saben mas que cualquier pancho que escribe en ole…