tecnico.jpg

El Gen Argentino

ravacha 95

Hace 20 años ya, el debate entre menottistas y bilardistas se constituía en el eje de la charla de cualquier cafetín. Cada maestro con su librito, representaban los antagónicos criterios de Lírica Vs. Orden. Con el tiempo, solo se renovaron los nombres y no mucho más. Por la Lírica supo aparecer Basile, el Tacticismo más acérrimo se posó sobre el hombro de Bielsa, y cada uno acomodará al Kaiser y al medio cíclo del hombre Peker donde le parezca. Lo cierto (?) es que desde aquella final en Roma y el llanto de Diego hasta nuestros días, han pasado casi 18 años, y solo tres técnicos y medio, quienes han probado un puñado de formaciones y una sinfin de players, para un resultado de dos copas y posteriores 14 años consecutivos sin títulos en mayores.

Distinta ha sido esta historia para nuestros juveniles, con 5 títulos mundiales en 12 años y la esquiva medalla dorada de los J.J.O.O. (la misma que sigue gambeteando a Brasil). La receta del éxito de los boys radica entonces en la idea de proyecto a largo plazo, donde se ha recorrido bastante mas que la Gazzeta o el Marca en busca de los nombres mas funcionales a la causa. Las generaciones se han ido solapando, y da la sensación que los técnicos tambien. Pekerman, Ferraro, Tocalli, Tojo, etc, foman parte de una transición pautada y sujeta a la homogeneidad de una idea, en contraste con la mayor, aferrada a sus caprichos tácticos y los jugadores “pollos” de cada técnico, algunos con distinta suerte que otros (Muñeco Gallardo, Piojo Lopez, Cubetera González (?), Gomero Santana, Mencho Medina Bello, Inserte un apodo Balbo, Gringo Heinze y demás etc.).


ravelli_468.jpg

Amores perros II

ravacha 173

Buenas tardes redonderos:

Los saco del eje un segundo (?). Dado que los campeonatos regulares han concluido y solo queda algún que otro torneo de poca monta por definir, les transmito una idea que se cruzó por mi cabeza esta mañana. Pasé por un puesto de diarios, vi la tapa y honestamente me tenté. El Neri con 20 dedos me sonreía desde la portada del pasquin naranja, imitando el festejo antártico del Topo Gigio de Don Torcuato.

Dejé mi peso sesenta y me traje al laburo un ejemplar. Ni hablemos que chorrea auriazul (después del naranja y el verde debe ser el color que mas se usa). Paso las dos primeras páginas, que son las mas zafables, y me encuentro que en una columna escribe una tal Sabrina Ravelli. No, yo tampoco sabía que era el nombre del gato que se comía Neri. Bue, es ése.