Arrancó la B Metro y con ella pintó el bardo. Claro que este fin de semana se juega lo que sería la tercera del Final (?) y hay equipos que todavía no disputaron un solo partido por las copiosas lluvias. Este quilombo se explica masomenos así.
El ascenso está lleno de historias dramáticas, inolvidables. Y sin dudas una de las mejores páginas en ese tono fue la que escribieron hace casi tres décadas El Porvenir y Villa Dálmine, en un desempate jugado para no bajar a la “C”. El héroe de esa tarde fue un tal Carlos Ismael López.
Pareciera que ese fue el spot publicitario prohibido (?) de reconocida marca de cerveza o quizás la advertencia de algún pope relacionado a cuestiones dirigenciales. Como sea, Quilmes se acerca a los puestos de vanguardia.
Otra imborrable jornada antropológica de domingo, mezcla de pasión por el fobal y La Aventura del Hombre. Resulta que salgo medio dormido a comprar facturas alrededor de las 10 de la mañana y veo la esquina de Caseros y Entre Ríos embanderada de rojo y blanco.