En un profundo ejercicio autocrítico (?), Brasil 2014 ha sido el cénit de las Copas de la era moderna. Aún así, algunas cositas que nada tienen que ver con 22 tipos atrás de una pelota, no terminan de cerrar.
Terminamos segundos. Aquello de "el primero de los perdedores" es cierto. Pero Argentina tuvo su mejor equipo desde 1986 y Sabella, con trabajo, dejó un mensaje muy claro al mundo del fútbol local, incluyendo medios que respiraron aliviados con el gol de Götze.
Al fin y al cabo, ¿no era ésto un juego? La voracidad tal vez lo haga olvidar, pero en la medida en que esto no ocurra, el auténtico amante del deporte y la competencia llegará sano a la orilla.