Y un día se terminó yendo Richard. Se agotaron los milagros, las dosis incontables de orto y, por suerte, también se acabó –momentáneamente- la constancia de algunos en practicar las chupadas de media más variopintas con tal de halagar “su inteligencia”. El hombre que decía poner una concesionaria con 2 lucas (?), el que afirmaba fumar dentro de una garrafa, el de los 6 defensores terminó siendo víctima de su propio círculo vicioso: se acabó la plata dulce, se acabaron los resultados para sus planteos Made in Taiwan.

Resulta casi una paradoja que en la misma semana en la que le robaron una cadenita, haya sido Viatri el artífice de su salida (?). De todas formas, el incidente del semáforo tiene mucho de lo que él hizo alguna vez con el fútbol: lo agarró desprevenido y de un zarpazo, le arrebató la estética y se largó a correr. El pobre deporte, que ya venía maltrecho, ni siquiera se preocupó en correrlo: algunos desgarros son más longevos que lo que puede acarrear un simple pique.Aunque bien podría haberle pedido un consejo a su ex-arquero fetiche, uno de los más reconocidos fondistas en pavimento del mundo (?). La apuesta de Caruso fue tan simple como metepúa: si se perdían los dos partidos, él se tomaba el palo. No sólo se perdió, sino que además se mostraron dos facetas de un equipo que no puede ni con su alma: en primera instancia, la de no encontrar respuestas futbolísticas y en segundo lugar, la de un equipo que ni siquiera puede mantener una ventaja que le vino casi desde el cielo. Porque Boca pudo haber encontrado aire en la victoria contra Vélez, pero cuánto le falta mejorar. Porque Boca defiende su arco con una displicencia que, cuanto menos, es alarmante. No sólo ya la señal de que Abbondanzieri sea titular (?) es suficiente, sino que parece que las desconcentraciones, las nuevas caras de inferiores que ya no son pretendidas por el G8 a los 15 minutos de haber debutado en primera por cifras millonarias (?) y ciertas ventajas que terminarían siendo decisivas para un equipo un poco pillo. Un poco nada más. Así se encontró La Academia con un gol que se dio tras una pelota parada, con una desatención compartida y masificada entre todos los de azul y amarillo. Así se fue al segundo tiempo y parecía que el circo armado por Richard en la previa no tenía más que un “Continuará”.Desde el más novato hasta el más experimentado comunicador social se mordía los codos pidiendo que corra la sangre para elaborar una morcilla de Caruso al aire. Pero, lo dicho antes, si los ladrones lo dejaron rengo , Viatri lo dejó sin laburo: al minuto aprovechó un rebote que dejó De Olivera para empatar el partido y un rato más tarde armó una muy linda pared con Riquelme -que empieza a jugar como si le pagasen (?)- y definió fuerte al primer palo tras una asistencia de taco del Edipo que usa la 10 (?). Perdió Racing, perdió a su DT y la danza de nombres tiene el dinamismo de una mula pasando fafafa a Jujuy vía Bolivia (?).

Pero no sólo de Boca y Caruso vive el fútbol. Se aferra, eso sí, porque a veces para lo que hay que ver es preferible sacarse el cerebro, reemplazarlo por pochoclo y clavarse alguna vaciedad protagonizada por Adam Sandler. Pero LR! hace duro su trabajo y trae lo mejor que dejó la octava:

– Cuando una quinceañera grita, llora, se arranca los pelos por –por citar un ejemplo- Axel. Cuando se va a diciembre porque se quedó dormida después de haberse pasado toda la noche haciéndose las mechitas, o cuando tiene un novio 6 años mayor que ella que dice respetar sus tiempos, pero que trabaja todos los sábados y domingos a la mañana. ¿Se le dice inocente acaso? No, se le dice pelotuda. Ahí está Huracán, haciéndole creer a cualquier ojo poco entrenado en la belleza que la estética trae como epifenómeno la insuficiencia defensiva. Es que El Globo dejó pasar una chance más (y van….) de ganar un partido tan sólo por no poder con su genio y tener bien claro hasta dónde sí y hasta dónde no. Le hizo un planteo novedoso aTigre, sin un delantero fijo, sino más bien con 5 jugadores que lo único que hacían era rotar puestos constantemente y aún cuando en el juego era notablemente superior, Monzón era uno de los puntos altos del equipo. Rodrigo Díaz está cargándose el equipo al hombro –un equipo que tiene un lastre más complicado que el que carga un Ricardo Barreda (?)- y se está convirtiendo en la figura excluyente de este presente un tanto triste para los de Parque Patricios. No sólo asistió muy bien a Trecarichi para que éste convierta su primer gol en Primera, sino que después robó una pelota en mitad de cancha, hizo una jugada personal más que interesante y clavó un terrible zapatazo desde afuera del área. Pero, Cagna se avivó de que atrás eran un Royal en polvo (?) y mandó a Morel para que actúe de nexo entre las líneas ofensiva y media. Luna puso el 1 – 2 luego de una linda combinación entre el ingresado y Arruabarrena, todo a un toque, y el fetiche de Quilm*s (?) fue quien empató el partido, mínimo un metro en offside. Sí, las puteadas de Cappa son deliciosas, al punto de que cualquiera desee que alguna vez tire “Arteche y la puta que te parió” (?), pero si no era en ese tiro libre, era en cualquier otra, Ángel. Se durmió el Globo y le costó 2 puntos.

– Y algún directivo de Banfield se habrá quedado solo en el despacho de un dirigente de Boca, mientras llevaban a cabo alguna de sus transparentísimas transacciones, y revisando, revisando habrá dado con uno de esos poderes que suelen andar pululando por esas oficinas: “Vale por 10 penales” decía el documento, y el hombre del sur del Conurbano habrá sido lo suficientemente rápido como para encanutarlo primero y encajarle algún paquete después (?). Esta vez el damnificado fue Atlético Tucumán, que venía arriba después de una gran jugada individual de La Pulguita Rodríguez, un descamisado que la va de wing derecho (?), que terminó siendo definida por sobre la apurada salida de Luchetti. Y con Banfield pasa que si no se arranca empatando y/o ganando, no hay nafta como para arrancar. Es decir, tener que atacar obligatoriamente puede provocarle un ataque de pánico a su entrenador. Más si se tiene en cuenta que en el banco de enfrente estaba uno que tampoco le hace nada de asco a hacer una zanja de 8 metros de ancho a la llegada del área grande. Empezaron a arreciar los centros, las pelotas paradas cerca del área del Decano parecían Plaza Constitución a las 7 de la mañana, la gente hacía lo suyo como para empujar un poquito al equipo y los grandes astros se alinearon para que algún penal apareciera por la comarca. Penal para Banfield, una nueva – vieja costumbre de los argentinos (?), gol de Silva. Total, nadie se va a quejar porque medio país tiene al uruguayo en El Gran DT (?). Después del gol, algunos ataques de ocasión, algún apuro para empatar más allá de lo forzado y un empate que terminó siendo sellado y archivado.

– Miércoles a la noche. Qué mejor que relajarse, poner la tele para ver un partido, alguna picadita y matizar la ingesta de snacks con un vino espumante bien frío. Lo mejor que puede pasar es que, después de algunos vasos, uno en el pedo crea que un artefacto exánime –como lo es la televisión- sienta empatía con uno y le devuelva la imagen que uno da. Pero no, son espejismos momentáneos del alcohol: así como hace a las mujeres más bellas, a los hombres invulnerables a las críticas y a Cuffaro Russo DT de tu equipo (?), también puede generar determinado grado de alucinación que está más asociado al stress que a la realidad misma (?). Entonces, no devuelve una mierda el televisor: Están jugando Godoy Cruz y Newell´s (?), y lo están haciendo peor de lo que uno se pudo imaginar. Newell´s no es tampoco propio de albergar muchas esperanzas (de acuerdo al nivel etílico), pero los últimos partidos del combo dirigido por el Thundercat Sensini(?) habían dado pie a su gente para que se suba al globo de la ilusión. Pero la ilusión a veces es tal porque se puede suscitar que el que lo visite puede ser un rejuntado de entusiastas troncos. Godoy Cruz, en cambio, bajó el listón notablemente del Clausura a esta parte, es cierto que sufrió un éxodo que amerita cualquier bipolaridad futbolística, pero también es cierto que algunos jugadores han decaído notablemente en su nivel, al punto de estar irreconocibles en comparación con las primeras fechas de este torneo. Se dejó vencer rápidamente con el gol de Formica, y se encontró en una desventaja que le costó remontar hasta que apareció el Chiqui Torres, un ex-valor de las inferiores leprosas, para poner las pardas que terminaron siendo definitivas. Empate y a otra cosa.

– El gran ganador de toda la fecha no puede ser otro que Colón. El equipo de Mohamed se dedicó llevar y traer golazos y aprovechar el cauce del partido para hundir a Arsenal en lo más profundo y sin un salvavidas cerca. El triunfo fue por 4 a 1 y la producción sabalera estuvo entre las mejores de un equipo en lo que va del torneo. Lleno de autoridad, con una convicción propia de esos equipos que saben muy bien lo que quieren y con la tranquilidad de saber que hacen las cosas para ser mejores que el rival (sin importar algunas ausencias que podrían dejar rengo al equipo), le sobró como para demostrar que, pese a algunas desinteligencias –léase pecheadas (?)- en momentos claves , como en el torneo pasado, viene manteniendo un nivel muy parejo en los últimos torneos y la llegada de Mohamed sirvió para reafirmar ese lugar en primera y alejarlo de los fantasmas de la promoción. Alfredo Ramírez, Rivarola (que antes había errado un penal), Bertoglio y Baumanfueron los que se hicieron presentes en el marcador. El que descontó en el equipo de Burruchaga fue Matías Pérez. Un Arse que está empezando a clamar por la vuelta de TyC (?) al fútbol. Aunque de persistir en una senda parecida, a lo mejor pueden llegar a un La Nueva Seguros sin despeinarse demasiado. Claro que, abajo suyo, hay otros varios equipos que están haciendo unos méritos que parecen ser inapelables. Ganó, gustó y goleó Colón, para prenderse en lo más alto de la tabla.

– Vélez ya sacó chapa de ser considerado un músculo. Un músculo que se trabaja para conseguir la victoria y que no admite más que eso. Un músculo que parece dar la imagen de ser imposible de doblegar. Es que a Vélez le ganaron el último partido por varios factores: por un gol que erró un delantero suyo que roza el límite del rídiculo, por un golazo de un jugador fuera de serie y por otro golazo, esta vez de un jugador que no conoce el miedo a la sobreexposición. Esa parece ser la única forma para arrancarle una victoria al intricado equipo de Gareca: con un fuera de serie, con algo excepcional que lo deje groggy y sepa administrar los golpes. YArgentinos será un buen equipo, le pondrá voluntad a sus numerosos intentos y hasta tendrá cierto compromiso estético. Pero lo que más se le acerca a un fuera de serie (por funcionamiento, no así por características “naturales”) es Juan Mercier, que lo más cerca que tiene al arco es a 45 metros. Y Vélez se llevó un partido, con un gol convertido en el primer tiempo. Un primer tiempo que debe de estar entre lo peor que se le vio al Fortín en mucho tiempo. Desconcentraciones absolutas, algunas dudas de algunos jugadores (en especial Cabrera) y muy bajo nivel de otros (Razzotti). Pero no, el Bicho hizo todo lo posible, inquietó –no mucho- a Montoya y quiso copar la parada. Le fue imposible. El gol de Maxi Moralez puso las cosas a placer de Vélez y así el local tuvo el tiempo necesario como para manejar el partido a gusto. Triunfo del último campeón que lo encumbra en la tabla de posiciones.

– San Lorenzo viene a paso firme. Consiguiendo resultados y algunos momentos de un funcionamiento que, si bien dista de ser el ideal, le alcanza para rivales que oponen una resistencia vacua. San Lorenzo puede yChaca can´t (?). Porque al Funebrero, el azar parece habérsele puesto de orto (?) y ahora hasta Rivero les hace golazos. El Burrito, con este sablazo mostró una faceta hasta ahora desconocida en él: ¿La de shoteador de media y larga distancia? No señor, la de ser un tipo respetuoso, al no gritar el gol contra su ex-club (?). Con un sólo gol parecía ser suficiente, porque más allá del cambio de entrenador en Chaca, la premisa parece ser siempre la misma: A ver cúando se la pueden dar a Alustiza como para que mueva un poco el avispero. El que lo acompaña un poquito es Morales, que le suple con inmensa voluntad algunas fallas de origen. Pero después de hacer esas salvedades, Chaca está complicadísimo. Sobre todo al repasar determinados nombres de la defensa: los hermanos sin cadera, el único defensor que se ata los cordones de los botines entre sí y el Stephen Hawking paraguayo marcando la banda izquierda. Si a todo esto, ni siquiera se le puede sostener un nivel aceptable de Tauber, ya la realidad pasa a ser, más bien, una mierda (?). El arquero salió a cortar un avance y en el camino se ve que se le rompió una uña o la seño preguntó algo y él levantó la mano (?), porque soltó la pelota para dejársela bien mansita a Papu Gómez, que no tuvo más que empujar al gol y firmarle la sentencia de muerte a Chacarita. Es inexplicable la inclusión de algunos jugadores, sobre todo cuando un gordo en camiseta con una careta de Scream haría un más digno trabajo alejando delanteros que a tipos, se supone, que desde hace más de 20 años que pasan horas y horas por día frente a su instrumento de trabajo. Por otra parte, San Lorenzo está en uno de esos brotes místicos en los cuales hasta parece que elKily González es buen jugador. O jugador.

– El hambre y las ganas de comer se juntaron en el partido Bring your own chair de esta fecha. Se juntaban el que nunca tendría que haberse ido y el que nunca tendría que haber vuelto, y alguna que otra vez estuvieron juntos y todo. Gimnasia visitó a Central y se llevó un empate que tuvo gusto a poco. No por el desarrollo del partido, porque el Lobo se encontró con un gol de Castro (y pensar que dicen que no quedan más volantes por derecha) a los 10 minutos, sino por la temprana decisión del equipo de sacar el pié del acelerador lo antes posible. Lo loco es que algunas luminarias del pensamiento sacuden la cabeza medio preocupados y diciendo “qué loco, ¿por qué le empezó a ir tan mal a los chicos estos de Rosario?”. Señora (?), Central fue puntero durante 4 fechas porque jugó en hilera con los peores 4 equipos del torneo. Guárdese y archívese (?). Para colmo de males, cuánto tendrá para sufrir el hincha Canalla, que debe asistir impávido como los señalados para volver a nivelar el marcador son Franzoia, escribiendo el manual de lo que no debe hacer un delantero (tuvo tiempo para el apéndice de lo que no debe hacer un jugador y hasta un ser humano ) y el mejor amigo de Isaac Newton, que sólo atina a poner cara de preocupado para que parezca que el esfuerzo no es estéril. ¿Cuánto tardó el Ubaldini rosarino para darse cuenta de que así la cosa no iba? Más de una hora, y tuvo suerte de que; un tiro de Jonatan Gómez haya pegado en Maldonado, el Rey Midas del gol en contra, y así el Messi Messy (?) celebre con lágrimas su primer gol en primera, mientras que los espectadores con lágrimas maldicen la orden de su entrenador de hacerlo jugar en un cajón de 10 X 20. La incapacidad de algunos, la suerte de otros, y las pocas variantes que mostró Gimnasia para reencauzar su triunfo fueron suficientes razones para que esta vez, sólo por esta vez, el Lobo le haga precio a la escudería Centralista.

– En la cancha de Quilmes se jugó lo que ya es un clásico: Mostanesa – Salsa Barbacoa (?). Lanús visitó a un Estudiantes que arruinó la que hasta ahora había sido la única rama de la estética con la cual se comprometió: la moda y el diseño de su camiseta. En lo que fue un choque entre dos de los equipos más importantes del torneo, las cosas se dieron muy parejas. Cierto es que además el “local” tenía muchos afectados a la Selección. Aún así, marcó tendencia, atacó, trató de ser incisivo y se hizo eco de la notoria merma de rendimiento Granate, al que ya no lo ayuda ni siquiera la suerte: Bossio 4 años y ni un rasguño ,Caranta 2 meses y ya 2 fracturas (?). Estudiantes aprovechó que la suerte se la caga de risa al pobre Lanús yCarrusca (!) abrió la cuenta, como para que la tarea de cortarse las bolas con un alfajor le sea más justificada a la parcialidad que se había movilizado a la vecina localidad de Quilmes. Pero Estudiantes cometió un pecado a los que no está acostumbrado. Será porque no cuenta con voces de experiencia o referentes más allá de los obligados (Calderón) como para no tirar un equipo a la cancha con más olor a pis que otra cosa (?). O será que el propio Carrusca es el que puede aportar su experiencia en la agencia Baccetti – Abulia (?). Lo cierto es que se durmió en los laureles, se dejó estar. Y Lanús podrá no estar pasando su mejor momento, pero tampoco es que es un Central, un Chacarita o un River (?), así que a pocos minutos del cierreCarlos Quintana empató un partido que le había venido bien torcido al visitante y lo gritó con alma y vida. Las manos vacías del Pincha, las consultas al banco y Sabella de repente que le fue a lavar el auto a George Mc. Fly (?), lo dicen todo. El Delorean se rompe y justo justo, suena el pitido final. Un empate que tiene más de boludez que de paridad.